Kimmy Podridske, de Edmonton (Canadá) y su marido son fans de The Legend of Zelda. Para demostrarlo, su pastel de boda tenía la forma del castillo de Hyrule.
Las figurillas que representaron al matrimonio fueron precisamente Link y Zelda, tal y como podemos apreciar en la foto.
Este tipo de demostraciones de pasión por la saga, aunque sea con acabados caseros, demuestra hasta donde llegan los aficionados, que hasta en días tan señalados como la ceremonia de boda no quieren olvidar la estima que tienen por Zelda.
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